Por Simón F Carrillo

 

Korrosive es una banda de thrash metal extremo de Toronto, Canadá, formada en 2015. Con un estilo único, Korrosive ha llevado el thrash metal a una nueva dimensión. Las influencias y el estilo de la banda han dado origen a lo que es esencialmente el “sonido Korrosive”, mezclando riffs agresivos, blast beats y lo que es esencialmente thrash metal con esteroides. Nueve años después de formarse, los thrashers canadienses lanzan su tercer álbum de larga duración, “Katastrophic Creation”, del sello CDN Records. Rad Zarei (voz) es el único miembro original restante y en este último lanzamiento se le unen Derek Solomos (guitarra), Jack Neila (guitarra y bajo) y Kaveh Afshar (batería), mientras que Nick Radlovic (bajo) es el último recluta. Korrosive no es tanto una banda de thrash retro, sino una banda que busca ese estilo clásico sin ser servilmente devota de los sonidos de los 80. Seamos realistas, mucho thrash vintage estaba mal grabado y a menudo estancado en una rutina de composición en 4/4, pero en su época todo era tan fresco y nuevo que no importaba demasiado. Por eso, bandas como esta intentan más crear una sensación que un sonido explícito.

Este nuevo trabajo viene a completar la trilogía musical y gráfica que iniciaron en 2021 con “Kaustic Hordes” y que Ed Repka ha sabido interpretar y llevar al extremo en estos últimos dos discos, reforzando la visión y la propuesta profética de la banda, una muestra final del balance entre agresividad y groove que posee la banda.

Donde otras bandas deciden girar hacia el lado ocultista y satánico del metal, el thrash siempre ha parecido caracterizarse y destacar por su tono inquisitivo y revolucionario, compartiendo más de lo que le gustaría con el punk, tocando temas “realistas” y cercanos a las personas, usando conceptos como “infierno” y “demonios” como alegorías a la destrucción, guerra, contaminación y extinción. Precisamente eso es lo que creo que hace tan atractivo este nuevo lanzamiento. La mayoría de las canciones son arietes que te estrangulan en cuestión de minutos. En esta nueva entrega, la ferocidad e intencionalidad de cada corte nos reciben con fuerza. Así como en “In The Name of Destruction” rápidamente declaran que la guerra no ha terminado, nos empujan a continuar marchando a través de los cadáveres dejados por los combates previos, y todo en el nombre de la destrucción y la muerte liderada por la mano de fuego, como lo ilustran mediante sus letras, dejando en vista el daño que reside dentro de la mente de los que sobreviven, marcando sus almas con los sinfónicos gritos de las voces torturadas. “Nuclear Awakening” toma esta misma fórmula y la lleva un poco más allá. Esta canción, al igual que “Maelstorm”, demuestra el buen trabajo que Ben y Stu realizaron en el ámbito técnico; todos los elementos son inteligibles a pesar de la densidad de lo que están expresando, el mensaje de Rad en la voz se percibe claro. Con “Khaos Unbound” nos dan otra perspectiva, ideal para establecer que la energía del disco solo irá en ascenso. En este álbum todo está alineado apocalípticamente para dar paso a “Ashes from Atomic Dust”, un track que viene a cerrar esta historia con un pequeño respiro para el combate final, brevemente recordándonos a través de un pequeño símil a la melodía de “Septik Messiah”, la obra maestra de nueve minutos y medio con la que cerraron su disco debut. Este nuevo trabajo viene a completar la trilogía musical y gráfica que iniciaron en 2021 con “Kaustic Hordes”.

La descarga de adrenalina que me dio esta maldita bestia de álbum está fuera de serie. Este fácilmente puede ser uno de los mejores discos de thrash metal del año. Es como si combináramos a Kreator, Destruction y Sodom en uno para crear un lanzamiento de thrash metal asesino. Definitivamente, Korrosive es una banda a la que hay que seguir y estar muy pendiente de sus futuros trabajos y shows, ya que poseen demasiados elementos tanto muy propios y definidos, como variados y muy experimentales para ser de los grandes futuros exponentes del thrash metal. Si continúan lanzando trabajos tan interesantes y completos como lo han estado haciendo hasta ahora, está claro que lo serán y, por qué no, de las próximas grandes bandas del mundo.